Twitter y la conversación

Desde que comencé a tuitear a la fecha, la plataforma se ha convertido en un fenómeno social de alcance global, comenzando porque el presidente de Estados Unidos encuentra en los 280 caracteres su principal forma de comunicarse con el mundo.

Jack Dorsey, cofundador de Twitter, vino a México con un tema, la salud de la conversación, y muchas preguntas para entender cómo se ha utilizado la plataforma en momentos de crisis como @verificado19s en el temblor o el trabajo que ha hecho el INE o el movimiento #MeToo en México de Luchadoras. @jack no es el típico CEO de una compañía tecnológica de miles de millones de dólares, preocupado por maximizar la utilidad, y está en una suerte de misión y su mejor herramienta son Twitter y Square, compañía de pagos que también encabeza; en el caso de la red social de caracteres, se encuentra en transformación, aunque con un destino borroso en los detalles y claro en el objetivo de ayudar a tener una conversación constructiva a nivel social.

A diferencia de Facebook, que hoy quiere regresar a la conversación íntima entre amigos, Twitter busca que la plaza pública se despolarice.

La mejor forma de entender a Twitter es como me dijo un amigo: “es una organización que tiene un negocio y no un negocio que hizo una organización”.

Yo he vivido Twitter desde hace diez años que comencé a tuitear, en ese entonces la red social era relativamente nueva en México, pero su potencial era evidente dada su sencillez que la hacía más rápida que Facebook y más simple que MySpace.

Ese año Twitter había crecido exponencialmente en número de usuarios, al pasar de 1.6 millones en abril de 2008 a 32 millones en abril de 2009, y ante ello había tenido que duplicar el número de empleados para llegar a un total de 45.

En febrero de 2009, la valuación de Twitter era de 255 millones de dólares con un levantamiento de capital de 35 millones de dólares, que se sumaban a 20 millones de dólares anteriores, estaba a poco más de 4 años de hacer su debut en la bolsa.

En ese entonces, Twitter era mucho más simple y sencilla, pero mucho más limitada, lo único que podías hacer más allá de escribir caracteres era compartir links, por cierto, la mayoría de los links de esa época ya no funciona hoy, actualmente puedes transmitir en vivo, subir videos incrustados, memes y muchos más recursos que enriquecen la conversación.

Hoy Twitter tiene 134 millones de usuarios diarios con un crecimiento a tasa anual de 11 por ciento, de dicho número el 78 por ciento de los usuarios se encuentra fuera de Estados Unidos.

Además, la red social tiene más de 3 mil empleados y oficinas en 24 países, incluyendo a México, y registró ingresos de 787 millones de dólares en los primeros tres meses del año y una valuación en bolsa de 30 mil 800 millones de dólares.

Desde que comencé a tuitear a la fecha, Twitter se ha convertido en un fenómeno social de alcance global, comenzando en que el presidente de Estados Unidos encuentra en los 280 caracteres su principal forma de comunicarse con el mundo, por ejemplo, apenas el domingo, sacudió a los mercados luego de que a tuitazos amenazó a China con aplicarle aranceles ante la falta de avance en la negociación comercial y justo ese episodio refleja la confusión que en muchos genera Twitter, ¿es el mensaje o es el medio el que polariza?

En mi opinión, Twitter no polariza, refleja con más velocidad y prisa la salud de la discusión y para los políticos es irresistible el impulso de tratar de controlar la esfera de discusión ya sea con herramientas o haciéndose la víctima, pero sigo pensando que un trending topic no genera realidad únicamente la agudiza.

En cuanto al objetivo de Jack de mejorar la salud de la conversación a través de Twitter, es ambicioso, pero sin duda va a incidir.

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